¿QUÉ ES LIBRE,
PERO NO GRATUITO?

Sin anuncios

Contenidos libres de publicidad.

sin intermediarios

Relación directa entre público y creador.

Acceso Libre

Todo el mundo tendrá acceso al contenido.

Precio Flexible

El público decide cuanto pagar.

PREGUNTAS FRECUENTES:

Libre pero no gratuito significa que el vídeo que vas a ver no tiene ninguna restricción de acceso. Nadie ni nada te va a impedir verlo ni compartirlo. Pero a cambio te pedimos que pagues un dinero por el servicio dado. Así de sencillo.

Porque ese contenido ha llevado un trabajo, un gasto y te ha ofrecido algo. Te habrá gustado más o menos pero has consumido ese contenido. Y por lo tanto, lo justo es pagar por él.

Es como cuando vamos a tomar algo a una terraza. Nadie te prohíbe el acceso a la terraza. Nadie te obliga a pagar antes de pedir algo. El acceso a la terraza y a la bebida es libre.

Pero después del servicio no te levantas y te vas sin pagar. Si no que pides la cuenta y pagas. Puede que el servicio o el lugar te haya gustado más o menos. Pero en ambos casos pagas por el servicio. Por qué es lo justo.

Porque si decides consumir algo, lo justo es que pagues por ello. 

El contenido gratuito en la red, en realidad, nunca es gratuito. Siempre te está vendiendo algo, ya sea metiendo anuncios en los vídeos, derivándote a webs de compra o enganchándote a la marca para venderte otra cosa más adelante. O en el peor de los casos está usando tus datos personales para venderselos a terceros.

Ya sabes, cuando un producto es gratis, es que el producto eres tú.    

Es lícito, pero nosotros no queremos alimentar más ese modelo.

Tú vas elegir la cantidad a pagar después de ver el vídeo a partir de un mínimo. De esta manera si te ha gustado mucho podrás pagar un poco más y si no te ha gustado (o tu economía está muy mal) podrás pagar el mínimo que suele ser un precio extremadamente bajo.

Esto es algo que ni los cines ni ningún otro negocio te ofrecen.

Eso sin contar con el hecho de que todo el dinero que das va 100% al creador y su proyecto, sin grandes intermediarios de por medio, con la satisfacción que eso supone como consumidor.

No. No es una donación ni una ayuda económica ni nada parecido. Lo que pagas es el precio por el consumo que has hecho de un producto. Nada más y nada menos. No es un gesto de caridad. No estás haciéndole un favor a nadie. Simplemente estas pagando por un consumo. Al igual que cuando te compras una entrada de cine no es una donación ni un gesto de caridad, esto tampoco lo es.

En ese caso cada persona tendrá que hacer su valoración económica por separado. Igual que cuando vas al cine cada persona paga su entrada, solo que en este caso tendrás la opción de elegir el precio según te haya gustado más o menos.

Después del confinamiento del COVID19, hemos sido conscientes de lo importante que es para la sociedad que todas las personas tengan acceso libre a la cultura. Que no haya puertas ni muros económicos que la encierren.  

Porque, ¿te imaginas cómo hubiera sido el confinamiento sin acceso a los libros, a las películas, a la música…? 

El acceso libre a la cultura no es solo ocio y entretenimiento. Es una necesidad humana.
Un cimiento básico de cualquier sociedad.

Por eso hemos decidido hacer todos los contenidos de acceso libre, confiando en que una gran cantidad de gente va a pagar por su visionado, ya que son cantidades muy pequeñas, y de esta manera crear entre todos, una cultura libre y sostenible, donde todos aportamos nuestro pequeño grano de arena.

Por supuesto, al igual que hay algunas personas que se van de los bares sin pagar y no por eso lo hacemos todos (algo que seria muy fácil de hacer, por otro lado). La pregunta es: ¿qué tipo de persona queremos ser?

¿El que paga? ¿O el que no paga?

Por suerte para los bares, la mayoría de la gente, aun sabiendo que hay gente que no paga, paga. Por que entiende que es su obligación como consumidor. Pues esto es igual. Asumimos que habrá gente que no pagará, pero confiamos en que la inmensa mayoría si lo hará, ya que además estamos hablando de cantidades muy pequeñas de dinero asumibles por cualquier persona.

Somos conscientes de que al principio costará bastante cambiar el hábito de consumo de la gente pero confiamos en que cada día más gente y más proyectos se sumen a este modelo más justo, más equilibrado y libre de publicidad.

Por varias razones:

  1. Recibimos de media 6.000 impactos diarios en publicidad (incluido los niños) y esta cifra no para de subir. Éste es el precio que como sociedad estamos pagando por el todo gratis. Ese bombardeo constante de publicidad que recibimos todos a diario (incluido los menores de edad) creemos que se está volviendo cada vez más tóxico para todos y por eso no queremos seguir alimentándolo.
  1. El modelo publicitario es insostenible. Esto es porque al haber tanta publicidad diaria, el espectador cada vez es más inmune a ella, convirtiéndolo en una especie de espiral publicitaria infinita, donde los anunciantes necesitan usar técnicas de publicidad cada vez más agresivas o tener que buscar audiencias cada vez más grandes para poder vender algo. Esto obliga al creador a tener una audiencia cada vez más gigantesca si quiere vivir de los ingresos publicitarios (con todo el sobreesfuerzo y la inversión que eso supone). Es una locura totalmente insostenible, donde todos salimos perdiendo.    
  2. Meter anuncios sin control en un contenido es una falta de respeto al espectador, que se ve forzado a ver anuncios que no quiere ver y que encima intentan venderle algo a la fuerza, a veces de las maneras más engañosas posibles y apelando a las emociones más bajas del ser humano. Unas emociones que después de 6.000 impactos diarios se ven reforzadas, especialmente en los jóvenes, y que luego crean modelos sociales de todo tipo.
  3. Meter anuncios sin control nos parece una falta de respeto al creador, ya que depender económicamente de la publicidad puede alterar el propio contenido de los vídeos y su temática, haciéndolos forzosamente comerciales, rompiendo su ritmo interno o directamente cambiando el guion para poder vender el producto del anunciante. Y en el caso de los anuncios automatizados se pueden dar casos donde el creador vea que sus contenidos tienen anuncios que promocionan cosas que el propio creador rechaza.
  4. El modelo publicitario actual ha hecho que dejemos de valorar las cosas. El todo gratis a cambio de publicidad esta creando una sociedad que no sabe valorar lo que ve, porque nunca ha tenido que pagar por ello.

Porque es un modelo más equilibrado y justo, donde el creador da y el espectador da. Sin intermediarios. Sin anunciantes. Sin trampas. Sin atajos. Una relación directa entre el creador y el público. Un modelo donde se tiene acceso libre a la cultura pero se valora su trabajo y su esfuerzo económicamente.

Muy sencillo. Cuando una marca ha pagado por modificar tu contenido. Siempre que haya dinero de por medio, estamos hablando de publicidad que te fuerza a cambiar tu contenido como creador. Aquí también se incluyen los casos en los que el creador no ve nada del dinero en publicidad, como pasa con Youtube y los canales pequeños.

Por otro lado, si tu como creador quieres hablar de un producto, una película, una banda de música o cualquier otra cosa, porque te apetece y te gusta, eso no es publicidad, porque nadie te esta pagando por ello y por lo tanto no te esta forzando a nada.

Cada creador pondrá las opciones de pago que crea conveniente, pero siempre se intentará usar las formas de pago más seguras y mas rápidas, para que la forma de pagar no sea un impedimento.

Sabemos que aun hay mucha gente que no se maneja bien con el pago online, pero también sabemos que el futuro está en el pago online. Las nuevas tecnologías van a hacer este proceso cada vez más sencillo y más rápido.

Os animamos a que como consumidores os pongáis al día con el pago digital usando plataformas como PayPal o Bizum, ya que más pronto que tarde os va a tocar hacerlo.

Cuanto antes lo hagáis, antes podréis adaptaros a las nuevas formas de pago que se avecinan y más fácil os resultará pagar los contenidos Libres, Pero No Gratuitos.

Con este modelo sale ganando:

  • El creador, porque recibirá una valoración económica por su trabajo y así no dependerá más de los anunciantes o de grandes plataformas, creando una relación directa con el público y haciendo posible la viabilidad futura del proyecto, sin la obligación de tener un público gigantesco.
  • El espectador, porque no tendrá que sufrir publicidad en los vídeos, podrá elegir la cantidad a pagar según su economía (o sus gustos), creará una relación directa con el proyecto, sin intermediarios que se lleven parte de su dinero y estará haciendo que sus proyectos culturales favoritos sigan siendo viables en el futuro y de acceso libre para todos.
  • La sociedad, porque el acceso a los contenidos será libre para todos, sin restricciones ni privilegios haciendo que cualquier persona en cualquier situación posible, pueda acceder ellos. Esto directamente hace que la piratería deje de tener sentido, ya que cualquiera puede ver el contenido libre desde la web oficial. Además con este modelo hacemos que se baje el impacto en publicidad que recibe toda la sociedad a diario. Y a medio plazo se puede lograr que la sociedad consuma contenidos de manera menos adictiva, eligiendo los contenidos de manera mas consciente y no dependiendo de algoritmos que le dicen que ver y que no ver.

SI. Es como cuando vas al cine a ver una película por segunda vez. Pagas exactamente lo mismo que cuando fuiste la primera vez. Aquí pasa igual. Cada visionado es un consumo del contenido y por lo tanto tienes que pagar por él. Por eso los precios por visualización son tan bajos.

Esto dependerá de cada creador. Si el creador quiere ofrecerte una tarifa plana para ver sus contenidos es libre de hacerlo. Cada creador tendrá que decidir si quiere o no ofrecer esa opción.

NO. Los vídeos son para consumo personal y doméstico. Para proyectar un vídeo en un evento abierto al público como puedan ser clases, eventos culturales, eventos en asociaciones, etc… tienes que pedir permiso directo al creador del vídeo.

Pero esto no solo ocurre en los vídeos Libres Pero no Gratuitos, si no en cualquier vídeo de la red.

Por supuesto. El modelo Libre Pero No Gratuito es aplicable a cualquier contenido, ya sea música, textos, audios, podcasts, diseños, etc…. Cualquier contenido, esté en el formato que esté, puede adaptarse a éste modelo.


SOY CREADOR Y QUIERO USAR EL MODELO «LIBRE PERO NO GRATUITO». ¿QUÉ TENGO QUE HACER?

Para que un contenido sea Libre Pero No Gratuito tiene que cumplir estas 3 condiciones:

  • Que el acceso al contenido sea 100% libre.
  • Que el espectador pueda elegir la cantidad a pagar a partir de un mínimo.
  • Que el contenido esté libre de publicidad pagada.

Si cumples estos tres requisitos ya puedes decir que tu contenido es Libre, Pero No Gratuito. Así de sencillo.

Si tienes dudas de cómo conseguir hacer esto técnicamente (pasarelas de pago, servidores de vídeo, paginas web, logos, etc) puedes escribirnos a este mail y te daremos algunas recomendaciones:

info@sinapsisfilms.com